Así fueron los últimos minutos de Matthew Perry: revelan los escalofriantes detalles de su muerte

El día de su fallecimiento, el intérprete de Chandler Bing, consumió varias dosis de ketamina en un periodo de seis horas

Agosto 19, 2024 •

 

matthew-perry-1200x675.jpg

Matthew Perry sufría de una fuerte adicción a la ketamina para tratar su depresión y ansiedad

GETTY IMAGES

Matthew Perry, el querido Chandler Bing de Friends, murió en circunstancias trágicas y sorpresivas que conmovieron a la industria del entretenimiento y a sus innumerables seguidores alrededor del mundo.

Recientemente se revelaron algunos detalles sobre sus últimos momentos, los cuales estuvieron marcados por una lucha interna y la dependencia a las drogas, que finalmente le costó la vida.

Te puede interesar:

imane-khelif--1200x675.jpg

Entretenimiento
¡Irreconocible! Imane Khelif impactó con un radical cambio de look después de los Juegos Olímpicos de París 2024

matthew-perry-1200x675.jpg

Entretenimiento
¿Quiénes son los dos médicos detenidos por la muerte de Matthew Perry y de qué se los acusa?

 

¿Cómo fue el último día de Matthew Perry?

La adicción a la ketamina se convirtió en una sombra que persiguió a Perry durante los últimos años de su vida. Documentos oficiales revelan que el actor consumía grandes cantidades de este potente anestésico, del cual llegó a inyectarse hasta ocho veces al día.

Su asistente personal, Kenneth Iwamasa, jugó un papel importante en esta espiral de decadencia, puesto que sin tener entrenamiento médico le administró la droga bajo la instrucción de un médico y a solicitud del actor.

El día de su trágico final, Matthew Perry fue encontrado sin vida en el jacuzzi de su residencia, boca abajo, tras haber recibido múltiples dosis de ketamina.

Según los informes de las autoridades, en el día de su muerte, Perry había sido inyectado con esta sustancia tres veces en menos de seis horas, incluyendo una solicitud explícita de una “gran dosis” poco antes de su muerte.

¿Cuánto gastaba Matthew Perry en su adicción?

A lo largo de los años, Perry fue muy abierto respecto a su lucha con las adicciones, una batalla que detalló con franqueza en su autobiografía.

Sin embargo, documentos presentados a las autoridades revelan que había desarrollado una adicción severa a la ketamina, utilizada para manejar su depresión y ansiedad. Esta adicción alcanzó un punto crítico en los últimos meses de su vida, con Perry llegando a gastar hasta 55 mil dólares mensuales en esta sustancia.

 

¿Quiénes están involucrados en su muerte?

Kenneth Iwamasa administró la ketamina bajo la instrucción de Perry y el respaldo del Dr. Salvador Plasencia, quien también ha sido señalado como responsable por facilitar el acceso continuo a la droga. Tanto Iwamasa como Plasencia están ahora enfrentando acusaciones legales por su rol en la muerte del actor.

También se detuvo a un distribuidor, Erik Fleming, conocido del actor, que se encuentra entre los principales implicados. Estos individuos no solo proporcionaban la droga al actor, sino que también lo alentaban a continuar consumiendo.

Además, se ha logrado identificar a la persona que vendía la droga, llamada “la reina de la ketamina”, Jasveen Sangha, y otro médico involucrado parte de la red de distribución.

¿Cuáles son las implicaciones del caso?

El caso destapó una red de distribución y abuso de fármacos que explotaba la vulnerabilidad de Perry. La investigación ha puesto de relieve no solo la dependencia de Perry a la ketamina sino también las estructuras que permitieron y perpetuaron su acceso a dosis peligrosamente altas de la sustancia.

El fallecimiento de Matthew Perry deja un vacío en el mundo del espectáculo y entre sus numerosos admiradores. Más allá del dolor y la controversia, su historia resalta la necesidad urgente de abordar las cuestiones de salud mental y la adicción en todas las esferas, especialmente en las de alta presión como la de Hollywood.

La trágica muerte de Perry es un recordatorio sombrío de los desafíos que enfrentan incluso aquellos que parecen tenerlo todo. Su legado, si bien marcado por el éxito en pantalla, también sirve como un llamado crítico a la acción para abordar la adicción y la salud mental con la seriedad y el apoyo que requieren.