Uno de los atletas más populares en este momento es el boxeador mexicano Saúl «Canelo» Álvarez. Pocos conocen este aspecto del boxeador, quien tuvo una hija llamada Emily con su entonces pareja, Karen Beltrán, a los 17 años.

Su hija mayor, Emily Cinamon Álvarez, nació el 12 de octubre de 2005 en Guadalajara, Jalisco. Además de iniciar su carrera en el boxeo en ese momento, Álvarez también comenzó a salir con Beltrán. A pesar de que la pareja se separó poco después del nacimiento de Emily, tomaron la decisión de mantener una buena relación en beneficio de su hija.

El segundo nombre de Emily, “Canelo” en inglés, es un tributo al apodo de su padre. Canelo ha sido siempre un padre presente en la vida de Emily. Ella, incluso, demostró su interés por los deportes ecuestres desde muy pequeña, tanto que ya a los cuatro años comenzó a participar en competencias en este campo.

Emily tiene su propio sueño olímpico a pesar de que su padre es un boxeador muy conocido mundialmente. Entrena asiduamente todos los días para lograr su objetivo de representar a México en el evento ecuestre de los Juegos Olímpicos.

Cinamon cumplió recientemente 15 años y recibió un regalo de su padre que muchos de sus seguidores en las redes sociales no esperaban. Recibió una camioneta GMC Denali último modelo de su padre, cuyo valor se estima en $100,000 dólares. Al ver el regalo, los asistentes a la fiesta de cumpleaños no pudieron contener sus gritos de alegría.

La hija de Canelo le dio las gracias a todos quienes asistieron y a sus padres por compartir una ocasión tan memorable en su vida. “Quisiera agradecer a toda mi familia y amigos que pudieron acompañarme el sábado en mi fiesta, agradecer a mis padres, los decoradores de tan hermosa fiesta y a todos por ser parte de una fiesta verdaderamente inolvidable”: expresó la joven en agradecimiento en un video que subió a su perfil de Instagram.

La celebración del cumpleaños de Cinamon Álvarez con su familia y amigos fue inolvidable. La cumpleañera y sus amigos festejaron hasta altas horas de la noche en la pista de baile, disfrutaron de las decoraciones temáticas y una gran mesa de postres además de la sorpresa de su padre.

El éxito no se compara para nada con amar a los hijos y ser un buen padre, así lo demuestra la historia de vida del “Canelo” Álvarez. Por otro lado, la historia de Emily y su aspiración por competir en los Juegos Olímpicos es evidencia de que todos tienen derecho a ir tras sus objetivos y realizar sus sueños, a pesar de los desafíos que se puedan interponer en su camino.